Escribe: Juan José Lecanda
“EL PAÍS” del viernes 5 de Noviembre en un artículo titulado “ALARMAS DE TRÁFICO” y ante el incremento durante el mes de Octubre del número de víctimas (11 muertos más) se pregunta si ha tocado fondo el descenso de accidentes y muertos.
Sin perjuicio de que es necesario que “se encienda la alarma naranja”, considero que habría que:
- Estudiar en detalle todo el periodo del año en comparación con el 2009, la tendencia del último trimestre y la tipología de los siniestros.
- ¿Ha habido factores nuevos? ¿Tiene influencia un supuesto menor rigor sancionador de los últimos tiempos?
Resulta desde luego poco lógico que, salvo razones muy coyunturales ó climatológicas, en una situación de cuando menos estancamiento de la situación económica y retraimiento del consumo, no se produzca una continuación de la caída de los accidentes por la menor exposición al riesgo.
¿Se ha tocado fondo?: aunque el camino recorrido ha sido excelente, no podemos basarnos en el motivo de la crisis económica ni de la reducción de la velocidad como garantes de un futuro mejor.
La combinación de diversos factores como la formación de los nuevos conductores y la actualización de los antiguos que se manifiesta como punto débil, junto con la exigencia más firme del buen mantenimiento de los vehículos con especial énfasis en el control de las I.T.V., y la reparación de carreteras comarcales más peligrosas, pueden resultar, entre otros, los nuevos objetivos que permitan proseguir en la buena línea.
En cualquier caso, hay que confiar que Pere Navarro y su equipo, impulsores de una serie de medidas de indudable éxito, aborden éstas u otras cuestiones. Se merecen esta oportunidad y personalmente confío en que acertarán.
Esperemos que el año 2010, a pesar de los nubarrones se cierre con un descenso del orden del 10 por ciento en accidentes graves y muertos.
Los próximos 3 años deben consolidar todavía descensos pero desde luego hay que adoptar diversas medidas que lo aseguren y reafirmen conductas y medios técnicos para el horizonte 2015-2020.
El camino está trazado pero hay que cuidarlo, revisarlo y mejorarlo. Confiemos en lograrlo. Amén.
En términos aseguradores el seguro de Autos ha iniciado aparentemente un suave cambio de tendencia.
Con un ambiente de preocupación por la reiterada reducción de precios medios que, en mi criterio, era sostenible por los resultados favorables, se inició el año con una “llamada” hacia la subida de precios por prevención y contagio que, aunque parcialmente, se ha producido de modo que la facturación del año puede ser igual al año anterior. Se había pronosticado una reducción del 2% al 3%.
Algunos especialmente eficientes están beneficiándose de la situación obteniendo cifras notables de crecimiento mientras que otras Entidades, supongo que por la incidencia de fusiones ó de incoherencia entre precios de cartera y nueva producción , están siendo castigadas.
La concentración sectorial sigue pujante y los nuevos sistemas de distribución siguen siendo poco significativos.
En cuanto a resultados, el ratio combinado empeora con bastante claridad si bien los rendimientos financieros sostienen todavía unos resultados más que favorables, en mi opinión. Es posible, sin embargo que los márgenes excedentarios en las provisiones técnicas se hayan reducido notablemente y ya se sabe que la siniestralidad del ejercicio, sin ayudas, puede dar serios disgustos en los menos eficientes y/o necesitados de nuevo negocio.
Por tanto, salvo que se dé un período de endurecimiento de la política de precios, que no es segura por una necesidad no clara al menos en bastantes Entidades, ó se produzca un mantenimiento de la tendencia a la reducción de la frecuencia siniestral, en el año 2012, como he indicado en varias ocasiones, puede producirse una nueva crisis ó al menos tensiones graves en algunas Entidades.
Espero que mi pronóstico no esté justificado y que me equivoque. ¿O sí?.