
Hace unos meses, poco antes del verano, conocí a Maite Martínez de Arenaza en su taller de arte en el barrio bilbaíno de Deusto. Fui, junto con mis amigos Manu Clausen e Iñigo Erhardt, a recoger los 27 grabados numerados que le habíamos encargado que hiciera a partir del logo del Foro de diletantes de Bilbao, obra del miembro de honor Agustín Ibarrola.
Maite nos había preparado primorosamente en unos sobres muy grandes cada uno de los grabados o mejor, como ella se encargó de corregirnos xilografías, técnica de impresión con planchas de madera de la que es una experta; además contó con la supervisión del maestro Ibarrola que gubia en mano fue trazando los surcos que se impregnaron de la tinta que empapó el papel que se convirtió en una nueva obra de arte.
El otro día recibí una invitación de Maite, me invitaba a la inauguración de La Taller, su última obra de arte, un lugar situado en la calle Maestro Iciar, 4, cerca de Solokoetxe, barrio que está encima del Casco Viejo de Bilbao, donde imparte clases a alumnos de todas las edades y expone obras de artistas contemporáneos. Para el comienzo eligió xilografías y grabados de Agustín Ibarrola.
Como el día de la inauguración estaba de viaje, le llamé a Maite para excusarme y sobre la marcha le propuse si podía ir a conocer la nueva sala de arte el día de la Inmaculada. Como su respuesta fue afirmativa, allí nos fuimos Carmen y yo. Desde la parada del metro del Casco Viejo, siguiendo por la calle Ronda, donde nació Unamuno, enseguida se llega a la sala La Taller. Cuando llegamos ya estaba Maite allí, un lugar bonito, con dos zonas bien diferenciadas, la de exposición donde lucían las xilografías de Ibarrola y las planchas de las mismas a un lado, y la zona de clases con mesas para una media docena de alumnos con una prensa que probablemente tendrá 100 años. La decoración es sencilla pero efectiva y con buena luminosidad para que resalte la obra expuesta. Nos contó que, junto con sus padres, recuperó viejas vigas en el techo que estaban tapadas por cemento lo mismo que unas columnas que dejaron con ladrillo vista. Es un lugar acogedor.
Maite tiene intención de convertir La Taller en espacio cultural donde periódicamente se celebren eventos para debatir sobre las artes y las letras. Nos decía Maite que quiere dar a conocer La Taller por todos los medios posibles, incluidas las Redes sociales.
Otros amigos del Foro de Diletantes de Bilbao pasaron por La Taller antes, y

seguro que otros irán en el futuro porque vale la pena conocer a Maite y a su última obra. Bilbao sigue la buena ruta de reinventarse y promover nuevos espacios de convivencia.
P.S. Se puede disfrutar también de la obra gráfica de la artista ganadora del premio Ciudad de Orduña, Cristina Gutierrez-Meurs, Erramun Landa e Izaskun Álvarez Gainza.