Escribe: Carlos Biurrun
España es uno de los países de la Unión Europea con índices de siniestralidad vial más bajos.
Es una buena noticia para comenzar el año que los muertos en carretera hayan bajado de los 1.500 el año pasado, 1.479, “la cifra más baja de los últimos cincuenta años” en palabras del Ministro del Interior.
Es innegable que muchos factores han contribuido a una disminución, año tras año, de esa cifra, pero creo que es de justicia resaltar que es preciso contar con un plan para que dichos factores se den y además de forma continuada. La construcción de ese plan y su seguimiento es obra de personas y en este caso concreto de un equipo de personas dirigido inteligentemente por el Director General de Tráfico, Pere Navarro.
Son ocho años consecutivos de disminución y que habrá que cuidar para que la cifra siga bajando. “Tenemos 1.479 razones para hacerlo”, decía ayer el Ministro del Interior. Al parecer hay margen para ello, después de haber afrontado los grandes temas, el carnet por puntos, la reforma del código penal, el centro de denuncias de León y la nueva ley de tráfico que refuerza el sistema sancionador.
En este sentido el propio Navarro señala que “cuando ya te has ocupado de los grandes temas tienes que ir a colectivos y a temas estratégicos y ahí ya tienes que buscar qué puedes hacer por los peatones, por los motoristas, por los ciclistas, por la gente mayor o por las salidas de vía”. En España mueren 500 personas atropelladas, 250 en ciudad y 250 en carretera, otras 500 pierden la vida por salida de vía y cerca de 400 en accidente de moto. La velocidad está presente en la mayor parte de los casos.
Uno de los puntos del Plan estratégico 2011-2020 pretende reducir en un 30% el número de fallecidos en carreteras secundarias, donde se producen el 75% de las muertes de tráfico. Pere Navarro propuso el pasado agosto reducir la velocidad permitida a 90 km por hora en todas las vías convencionales.
Los nuevos mandatarios del Ministerio del Interior deberán tener mucho cuidado de no bajar la guardia en las medidas a tomar y su control ya que no va ser fácil conseguir el reto planteado por la Unión Europea de reducir un 50% los muertos en carretera en el horizonte 2020.
Una de las principales razones de la bonanza de resultados en el seguro de autos ha sido en los últimos años la considerable disminución de los fallecimientos en carretera. Es un aspecto a vigilar y a apoyar cuantas medidas puedan tomarse para seguir en esa línea.
¡No bajemos la guardia!
