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En enero pasado, 17 líderes del sector asegurador expresaron su opinión sobre las perspectivas para 2015 del seguro español cuyo documento se puede descargar desde aquí.
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A la vista de los resultados del primer semestre con razonable recuperación de los seguros de daños, importante crecimiento sostenido de salud y preocupante evolución del seguro de vida hemos pedido de nuevo su opinión haciéndoles dos preguntas, precisamente sobre el seguro de vida y las medidas que deberían tomarse para el cambio de tendencia.
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2 preguntas sobre el seguro de vida y su evolución:
- ¿Cuál es tu opinión sobre el cambio de tendencia en seguros de vida, se mantendrá o no a final de año?
- ¿Qué está pasando en el seguro de vida para tener una situación a junio tan negativa y qué medidas propones para cambiar el signo del crecimiento?
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Respuestas de los expertos
(haz clic en cada nombre para ver la respuesta correspondiente)
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Pilar González de Frutos, Presidenta de UNESPA
El entorno macroeconómico europeo de bajo crecimiento de la economía y un elevado endeudamiento ha justificado las extraordinarias medidas adoptadas por el BCE para dinamizar la economía europea. Estas medidas y su influencia en la evolución de los tipos de interés son muy favorables para los deudores y los emisores, pero no para los ahorradores y los gestores del ahorro. Todo indica que la tendencia se va a mantener durante todo lo que resta del año.
El seguro de vida riesgo está creciendo y recuperando el peso que tenía hasta 2008 en las carteras de las aseguradoras. Es un indicador de la paralela recuperación del crédito.
El seguro de vida-ahorro está encajando el efecto de los reducidos tipos de interés, como el resto de los instrumentos canalizadores de ahorro.
¿Se puede cambiar la tendencia? Como señalaba anteriormente, la situación económica y su corrección se van a extender en el tiempo y de su evolución dependerá, esencialmente, el cambio para el seguro de vida ahorro. Entre tanto, una flexibilización de las normas de consumo de capital para inversiones a largo plazo, podría permitir a las aseguradoras elegir activos con una rentabilidad más atractiva que poder ofrecer a los clientes. Finalmente, cualquier incentivo al ahorro siempre es de gran ayuda.
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[tab title=»José María Campabadal»]
José María Campabadal, Presidente del Consejo General de Mediadores de Seguros
Disminución en la renta disponible y bajos tipos de interés acelera el decrecimiento, que creo se mantendrá hasta final de año con perspectivas negativas para 2016.
Hay que profundizar en seis elementos clave:
- Aumento de la cultura financiera y de previsión de la sociedad española,
- Aumento de las rentas disponibles de las familias y empresas,
- Análisis del envejecimiento de la población,
- Productos innovadores,
- Ventajas fiscales al ahorro y al riesgo, y
- Mejora en la distribución de productos que presenta una alta dependencia de bancaseguros y poca presencia de agentes y corredores a diferencia del resto del mercado europeo.
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[tab title=»Tomás Rivera»]
Tomás Rivera, Presidente de FECOR
Creo que, a las alturas de año en que nos encontramos, no habrá cambios significativos hacia una situación mejor antes de finalizar 2015. Si a esto le añadimos que estamos en “periodo electoral permanente”, quizá aquellos que pueden plantearse destinar cantidades a productos de ahorro/inversión prefieren esperar a ver como se resuelve la contienda porque, en función de quien vaya a gobernar después, las medidas destinadas a promocionar el ahorro privado pueden ser radicalmente distintas, sobre todo desde el punto de vista fiscal.
Si bien es cierto que los últimos meses del año parecen propicios para plantearse invertir en aquellos productos de ahorro que puedan ayudar a optimizar fiscalmente nuestras cuentas y esto podría favorecer que haya un repunte, por pequeño que sea.
Para mí, hay una clara falta de voluntad política a la hora de promocionar la previsión social complementaria. Habría que disponer, desde los poderes públicos, de todo lo necesario para concienciar a la ciudadanía respecto a la situación real de nuestra pirámide de edades, el futuro de las pensiones públicas, la necesidad de tener protegidos nuestros patrimonios y a nuestras familias en caso de fallecimiento o invalidez….. Y hacer esto no resulta muy popular, por lo que se deduce de la actitud de nuestra clase política, en general, respecto a este importante pilar social.Tampoco debe ser popular incentivar fiscalmente el ahorro privado, motivo por el cual no se toman medidas potentes en este sentido.Por ello, desde el sector asegurador, todos los actores debemos seguir contribuyendo a crear esa conciencia de previsión social y actuar ante los poderes públicos, a través de las instituciones y asociaciones que representamos a compañías y mediadores, para que contribuyan de forma decisiva a crear esa conciencia necesaria en la ciudadanía.[/tab]
[tab title=»Pablo Mongelos»]
Pablo Mongelos, Director General de Lagun Aro Seguros
En cuanto a la evolución en lo que queda de año, puede ser que se produzca una cierta mejoría en los últimos meses, ligadas a acciones comerciales específicas, campañas de captación, etc, en productos con mucha estacionalidad en su producción, pero considero que ese cambio de tendencia se mantendrá.
En cuanto al decrecimiento en primas, el producto que lo explica en mayor proporción son las Rentas, seguidas muy de lejos por el UL. La menor producción de Rentas se debe claramente a la situación de bajos tipos de interés; muchas de las operaciones de rentas se configuran prácticamente como un producto financiero a competir con otros, como los depósitos, que consiguen además una mejor fiscalidad para personas mayores bajo determinados niveles de tipos de interés. Con la bajada tan acusada de tipos, estos productos pierden su fuerza.
La menor producción de UL puede ser debida al trasvase de producción de UL a PIAS y SIALP, ya que su opción de mejor fiscalidad a futuro nos lleva a ofrecer estas dos figuras, que sí presentan crecimientos.
Con el escenario de bajos tipos de interés, la entrada de primas se ve mermada, y convive con las salidas de saldos por rescates.La actual coyuntura de bajos tipos de interés, y la ausencia de tratamiento fiscal diferencial de los seguros de ahorro frente a otros instrumentos financieros, nos sitúa en un escenario difícil. En el pasado, con la filosofía de potenciar el ahorro a medio plazo, los seguros gozaban de exenciones fiscales
que no tenían otros instrumentos; la eliminación de estas exenciones ha ocasionado una perdida importante de atractivo y potencialidad de los seguros, y una pérdida de incentivo para ahorrar a más plazo, de previsión hacia la jubilación, etc.Por otro lado, la nueva normativa de solvencia, que penaliza los productos con garantías de interés a largo plazo, nos lleva a las aseguradoras a diseñar seguros con garantías muy cortas, y discrecionales en el futuro, lo que también ha supuesto la pérdida de esa característica diferencial de los seguros, y por ende, el acicate para que el cliente se decante a ahorrar bajo esta formula.En mi opinión la recuperación de los tipos de interés, llevaría por si sola a una recuperación de la producción. Al margen de ello, una buena medida para impulsar la venta de seguros, seria asignarles unas ventajas fiscales específicas, ligadas a ciertas condiciones como en el pasado. Las actuales ventajas de las que gozan algunos instrumentos como los PIAS, resultan muy poco significativas.[/tab]
[tab title=»Enrique Huerta»]
Enrique Huerta, CEO de Liberty Seguros
Para entender la evolución del seguro de vida, deberíamos analizar las fuentes del decrecimiento en las distintas modalidades del mismo.
Por una parte, en Vida Riesgo, aunque haya un decrecimiento en el número de asegurados, observamos que este decrecimiento se está ralentizando y creemos que alcanzará la estabilidad, incluso llegará a una tímida cifra de crecimiento positivo a fin de año. Esto impactará lógicamente en un mayor incremento en las primas de riesgo, que ya vienen mostrando una tendencia creciente.
En lo que respecta a los seguros de ahorro creemos que seguirá la tendencia decreciente en el número de asegurados puesto que parece que los clientes están redirigiendo su ahorro hacia otros vehículos como planes de pensiones y otros productos financieros. En este sentido creemos que los planes de pensiones continuarán acogiendo a nuevos clientes que quieren complementar de forma privada su pensión de jubilación y que eligen este producto como mejor alternativa ante los bajos tipos de interés que se ofrecen actualmente en los productos garantizados. Con respecto al decrecimiento de las provisiones matemáticas, consideramos que es algo eventual en lo que respecta al impacto de la volatilidad que producen las provisiones de los Unit Linked, y por la parte de los PPAs previsiblemente seguirá decreciendo por el movimiento hacia planes de pensiones, si bien las aportaciones del último trimestre del año por motivos fiscales ayudarán a frenar un poco la caída.
La incertidumbre en situación de los mercados financieros y los cambios fiscales no ayudan a generar un entorno estable para la toma de decisiones de ahorro en las familias. La buena noticia es que el ahorro financiero de las familias ha crecido por primera vez tras dos años de caídas. Para los seguros, el impacto no es tan positivo porque se muestra un desvío de este ahorro hacia otros vehículos.
Como medidas para mejorar el crecimiento, sobre todo en los seguros de ahorro creemos que debería enviarse la anunciada comunicación de la pensión estimada de jubilación de la Seguridad Social y del resto de productos privados. También consideramos que si de verdad queremos potenciar la previsión privada de la jubilación debería mejorarse la fiscalidad de los seguros individuales de jubilación y también la de las empresas que desarrollen seguros de ahorro para sus empleados.
En manos del sector está seguir trabajando en la transparencia en nuestros productos y en las mejoras tecnológicas. Desde Liberty seguimos apoyando la figura del Mediador como el experto en asesoramiento que más cerca está de los clientes y que mejor comprende sus necesidades y les puede ofrecer los productos más acordes a las mismas en cada momento de su vida.
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José Boada, Presidente de Seguros Pelayo
En mi opinión, el consumidor asocia los seguros de vida a una opción de ahorro a largo plazo.
Ahora con los bajísimos tipos de interés y con las escasas ventajas fiscales existentes para ese ahorro a largo plazo, el consumidor está esperando a que vuelvan a subir los tipos, manteniendo líquidos sus ahorros, incluso en cuenta corriente, o invirtiendo en renta variable, directamente o a través de fondos.
Para invertir en renta variable asocia más a los bancos o a los fondos de inversión que a los seguros en este tipo de producto.
El seguro de vida por tanto deberá comunicar adecuadamente a sus clientes que también somos buenos gestores en renta variable o en fondos, comparando e informando de las rentabilidad es obtenidas.
El consumidor asocia los seguros de vida a una opción de ahorro a largo plazo y GARANTIZADO.
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[tab title=»Antonio Muñoz -Olaya»]
Antonio Muñoz-Olaya, Presidente de COJEBRO
VIDA RIESGO continuará en tasas negativas debido a su excelente siniestralidad, lo que permite realizar descuentos aún a la tarifa.
En VIDA AHORRO, con un mercado de ahorro con tipos de interés nunca vistos tan bajos continuarán desmotivando su contratación.
Mejor evolución ha tenido el Plan 5, fundamentalmente comercializado por redes bancarias, más que por aseguradoras.
Los Planes de Pensiones se verán afectados negativamente por los cambios fiscales definidos en la reciente reforma fiscal.
PIAS y PPA’s también pierden atractivo comercial por la caída de rentabilidades.
Con el objetivo de la reactivación de la economía en la Zona Euro y, en base a políticas monetarias expansivas (disminución de los tipos de interés para favorecer el crédito y el crecimiento del PIB, devaluación del euro para favorecer las exportaciones, etc…), desde hace unos meses nuestro entorno financiero ha realizado un cambio sustancial en la retribución financiera.
A todo esto, se añade el perfil aversivo al riesgo en productos de inversión, que el cliente tradicional ha mantenido históricamente.
El escenario actual, y previsiblemente en los próximos 2 años, si no se produce algún efecto de riesgo político o económico exógeno, va a ser de tipos de interés cercanos a 0 %. Ya existen algunos bancos e inversiones en países centroeuropeos, Alemania y Suiza, por ejemplo, con tasas de interés negativas.
Respecto a las medidas para paliar esta tendencia, sugiero las siguientes reflexiones:
- El tipo de interés debe dejar de ser el argumento de venta en los Seguros de Ahorro, PPA, Planes de Pensiones, PIAS, etc. que hasta la fecha venía siendo el principal factor de atracción comercial.
- Como consecuencia de lo anterior, los conceptos de fiscalidad, garantía, solvencia, estabilidad, confianza, asesoramiento e información Online, inmediata, de cada entidad, ganarán peso en la valoración del cliente.
- Los rendimientos de las Provisiones Matemáticas de Vida se van a reducir de forma continuada y, por tanto, los beneficios de las entidades de Vida se verán afectados por dicha reducción.
- Las entidades aseguradoras utilizarán y conservarán todo lo posible los activos comprados en años anteriores, con rentabilidades, ahora muy altas, 3% o 4%.
- La Nueva Producción de Seguros de Vida Ahorro se bonificará / subvencionará con las inversiones en cartera, a través de las provisiones que no estén macheadas y se trasladará mediante la Participación en Beneficios y Promociones Comerciales para nuevos productos de duración a corto plazo.
- Derivación a nuevos productos donde el Cliente deberá asumir riesgo, (Unit Link, Fondos de Inversión, Fondos de Fondos, Gestión Dinámica de carteras, etc…).
- Las entidades deberán dotar a sus canales de herramientas y formación especializada para el Asesoramiento Financiero, no solamente en la contratación, sino muy especialmente en la
gestión de las inversiones en función de los cambios de tipos y del entorno económico.
- Los canales de distribución deberán pasar de meros Colocadores de Producto en Campaña a Asesores Globales del Cliente, y será éste quien valorará el acompañamiento asesor en la gestión de sus ahorros.
- Además, deberán dotarse de medios de comunicación online para tener perfectamente informados a los clientes de la evolución de los mercados y de las recomendaciones para sus inversiones.
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[tab title=»Aurelio Gil»]
Aurelio Gil, Ex Presidente de ACS-CV
En mi opinión el cambio de tendencia viene provocado debido al largo periodo de duración de la crisis económica. La situación en las familias de clase media esta resentida y por ello contratan lo obligatorio justo necesario , hablando en términos microeconómicos.
La recuperación y salida de la crisis económica es mas palpable en términos de macroeconomía, no en la mayoría de la clase media.
A finales del 2015 será pronto para un cambio de tendencia, junto con el punto negativo de la poca cultura aseguradora/previsora de los españoles , frente a mayor previsión de otros países desarrollados de la zona euro.
Dato que debería hacer cambiar a los españoles con situación delicada o inestable, ya que es el momento de necesidad de contratación de dichos seguros y ahí debemos estar los Corredores con el asesoramiento adecuado para cubrir sus necesidades.
Parte de la pregunta esta respuesta en el punto anterior y debemos añadir que los dirigentes políticos , de un partido u otro, no favorecen ni incentivan la contratación en los ramos de vida y pensiones , a su vez tampoco en el ramo de asistencia sanitaria.
Se necesita cambiar de actitud de forma generalizada y ser mas previsores, actuar con medidas.
Existe una necesidad futura en la mayoría de las familias españolas y por ello una oportunidad de desarrollo en el asesoramiento ante la venta de estos productos aseguradores.
Pero es necesario ese cambio de actitud más la no continuidad de la coacción bancaria ligada en las operaciones financieras por su propio beneficio egoísta, sin pensar en las necesidades reales del cliente y el producto adecuado, de esta manera el escenario seria diferente y mas correcto para toda la sociedad.
En este sentido soy optimista a largo plazo, por la posibilidad de crecimiento del ramo y por la diferenciación con el valor añadido que poseen los Corredores de Seguros.
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[tab title=»María Ameijeiras»]
María Ameijeiras, CEO NB21
Confío que la tendencia mejore y no a muy largo plazo. El sector empieza a estar concienciado de que hay que cambiar el tratamiento que se le da a este ramo. En mi modesta opinión lo estamos haciendo más despacio de lo que se debería pero esto es así, somos un sector lento en relación a los cambios.
Parece que está calando en la sociedad la idea de la necesidad de ahorrar. En el sector (tanto aseguradoras como mediadores) debemos ser más proactivos para potenciar esta necesidad que se crea por las circunstancias socioeconómicas que vivimos. Si la salida de la crisis se consolida y sabemos aprovechar esta oportunidad espero que la tendencia siga un rumbo positivo.
Es un cúmulo de circunstancias y factores los que provocan esta situación: por un lado está el momento económico que hemos vivido y que seguimos viviendo, (necesidad de liquidez en las familias, un escenario de tipos de interés bajos, poca cultura de ahorro…) y por otro las circunstancias propias del sector que nos han perjudicado (productos poco atractivos, mala gestión en la distribución…).
Mis propuestas serían las siguientes:
- Analizar muy bien los productos por parte de las aseguradoras para mejorarlos y poner el foco en conseguir maximizar la rentabilidad de los mismos sin transferir riesgo al cliente.
- Cambiar la manera de vender el ahorro por parte de aseguradoras y por parte de los mediadores: debemos tener la visión de que es un producto que fideliza a largo plazo (no deberíamos buscar rendimiento a corto, ni para nosotros ni para los clientes, sino pensar a largo plazo). Estamos hablando de decisiones muy importantes para nuestros clientes y por tanto tenemos que obrar en consecuencia. Se trata de una oportunidad para los mediadores, ya que tenemos la cercanía con el cliente y podemos ganar su plena confianza con este tipo de productos. Deberíamos poner el foco en la búsqueda del producto más beneficioso para nuestro cliente sacrificando si es necesario parte de nuestra rentabilidad. Nuestro objetivo deber ser ganar clientes a través de nuestro asesoramiento como valor añadido a ofrecer a los mismos.
- Trabajar conjuntamente en apoyar el fomento de la cultura de ahorro sumada a la cultura aseguradora: en comparación con otros países desarrollados España presenta una tasa de ahorro moderada y la cantidad destinada al ahorro es baja en proporción a los ingresos medios. Hasta este momento ha existido una cobertura estatal adecuada para la jubilación y una asistencia sanitaria gratuita, pero parece que esta situación puede cambiar a futuro. Ello obligará a tomarse más en serio los sistemas individuales de previsión social. Por parte de todos (AAPP, aseguradoras, mediadores..) se deben invertir más recursos en visibilizar esta situación y concienciar a nuestros clientes de la importancia de tener una adecuada planificación a largo plazo y de las bondades del seguro para poder conseguirlo.
Por poner algún ejemplo, podemos empezar por intentar cambiar el mensaje negativo que se tiene del seguro de vida riesgo: la mayoría de la gente no quiere hablar del mismo salvo que se lo imponga el banco con una hipoteca y debemos aprender a trasladar que un seguro es una manera de invertir planificando. En el caso de vida riesgo el mensaje adecuado sería invertir en tranquilidad (la que te da saber que si la fuente de ingresos falta el nivel de vida de tu familia no se resentirá). Esto es planificar. Y en ahorro, planificar no para conseguir una rentabilidad a corto plazo sino un colchón particular que no dependa de factores externos sino de tu capacidad, responsabilidad y perseverancia para hacerlo.
La idea es ayudar a cambiar la estructura mental que tenemos y por la que asociamos seguro a miedo (miedo a lo que pueda pasar) o a lo que no nos gusta (envejecer) y que nos hace evitar el pensar en la compra de estos productos por un concepto de seguro asociado a tranquilidad. Esto, como es natural, es un proceso y por tanto tiene sus tiempos de implantación. Hay que ir educando y convenciendo a la gente paulatinamente de la necesidad de este tipo de productos con el fin de que reconozcan la necesidad de los mismos y por tanto comiencen a solicitarlos.
Aunque se han dado pasos en la buena dirección en cuanto a sensibilización de la población acerca de la necesidad de fomentar el ahorro a futuro y se han diseñado y aprobado nuevos productos que están teniendo buena acogida (como los planes de ahorro 5), es necesario un impulso por parte de todos (Gobierno, aseguradoras, mediadores,…) y a diferentes niveles (fiscalidad, diseño de productos atractivos, formación, educación…) para que la percepción de la población acerca de los seguros de vida cambie y que al fin despeguen siendo un instrumento más a considerar en la vida cotidiana.
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[tab title=»Higinio Iglesias»]
Higinio Iglesias, CEO E2K Corredores
2014 no fue un buen año para el seguro de vida, que con un crecimiento del -2,6 % (frente al 0,9 % de no vida) contribuyó a una contracción de la facturación del sector del 0,7 % respecto a 2013.
La aceleración de la economía española representada por el crecimiento esperado del PIB en torno al 3 % para 2015, puede resultar en sí mismo un motivo para el moderado optimismo respecto
a la evolución del sector en su conjunto, no obstante, factores coyunturales como el desempleo y los bajos tipos de interés, este último que afecta especialmente a la rentabilidad de la cuenta y a la capacidad de generar productos atractivos, unidos a factores estructurales como la disminución de la población y el envejecimiento de la misma, plantean un escenario en el que habrá que ser extremadamente prudentes y no muy optimistas con lo que deberíamos de esperar para 2015 del seguro de vida.
Las circunstancias mandan y son las que son, unas coyunturales, que pueden ir a mejor en el corto-medio plazo, y otras estructurales, sobre las que resulta innecesario comentario alguno; en todo caso, será muy importante ver en que medida la industria aseguradora va incrementando su participación en la economía española (actualmente inferior a 6 % sobre el PIB) y esta participación se va aproximando a la que otros países referenciales de nuestro entorno tienen sobre las suyas (Reino Unido 11,5% , Francia 9,00% , Italia 7,6%).
Son varios los factores que pueden influir en el desarrollo del seguro de vida en España y con ello contribuir a incrementar el peso del sector en la economía , no obstante me gustaría llamar la atención sobre uno en concreto, y que es, a mi juicio, la necesaria puesta en marcha por parte de la industria de iniciativas y acciones estratégicas para el fomento de la cultura de la previsión y del ahorro que ponga en valor la capacidad y ventajas de los productos aseguradores ante el consumidor, un consumidor multicanal cuyos comportamientos y hábitos están sufriendo una profunda transformación. Como corredor de seguros quiero reivindicar, dada nuestra capacitación profesional y situación estratégica de proximidad al consumidor nuestra potencial ventaja frente a otros canales para jugar un papel relevante y contribuir a la consecución en este objetivo.
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