Declaración de la Federación Interamericana de Empresas de Seguros- FIDES

La pandemia del COVID 19 ha puesto de manifiesto la prioridad de trabajar para lograr un mundo sustentable basado en los objetivos de desarrollos sostenible (ODS) adoptados por todos los Estados Miembros de las Naciones Unidas, como parte de la agenda 2030. Las aseguradoras y las asociaciones que las representan en todo el mundo, incluyendo a FIDES, están comprometidas con estos objetivos.

Somos conscientes que trabajar en el logro de estos propósitos es un llamado universal a la acción para acabar con la pobreza, lograr una mayor inclusión, una mayor equidad de género, proteger el planeta y mejorar la vida y las perspectivas de todos los habitantes del mundo. Ello conlleva trabajar en forma prioritaria en las necesidades sociales, incluida la educación, la salud, las pensiones y las oportunidades laborales.

Estos objetivos abren nuevas oportunidades de cooperación a la actividad aseguradora focalizadas en dos grandes ámbitos: el interno, que abarca los cambios que se pueden lograr al interior de las aseguradoras y el externo que vincula al sector asegurador con el resto de las actividades que se realizan en el mundo.

En nuestro ámbito de operación, las aseguradoras estamos comprometidas con varios de los objetivos de desarrollo sostenible, como ser: una educación de calidad para nuestros propios recursos humanos (ODS 4); la promoción del trabajo digno y crecimiento económico (ODS 8); reducción de las desigualdades en nuestro personal (ODS 10); consumo responsable (ODS12) y prácticas ecológicas en nuestras propias actividades (ODS 14).

Como sector económico, estamos comprometidos a lograr una mayor equidad de género (ODS 5) en nuestro personal, equiparando las remuneraciones y permitiendo el acceso de las mujeres a los puestos intermedios, gerenciales y directivos de las compañías aseguradoras. Asimismo, varias asociaciones de aseguradores se encuentran impulsando e implementando planes especiales de equidad de género a fin de lograr una mejora importante en este índice en los próximos años. Sabemos que con ello estamos contribuyendo a construir una sociedad inclusiva en un mundo más igualitario y resistente a las crisis futuras. En este contexto, el sector asegurador hispanoamericano contribuye a un cambio cultural re-imaginando políticas y prácticas en los lugares de trabajo que allanen el camino de las mujeres hacia más y mejores oportunidades laborales y de liderazgo en nuestras empresas.

En términos generales, todas las actividades económicas dependen en mayor o menor medida del apoyo y la protección del seguro para llevar adelante sus actividades y lograr sus objetivos de crecimiento y desarrollo. Es impensable la existencia de un solo día sin seguros en el mundo ya que miles de actividades cotidianas no podrían realizarse de no ser posible el funcionamiento del transporte público y privado, el vuelo de los aviones, el traslado de millones de personas a sus lugares de trabajo, el inicio de actividades de millones de empresas en sus fábricas o la realización de operaciones financieras entre muchos otros. En este contexto, la actividad aseguradora puede ser un aliado importante para los gobiernos comprometidos con el logro de los ODS.

Una adecuada protección de la población más vulnerable a través de los seguros generales, de vida y rentas vitalicias permitirá la reducción de la pobreza y que las personas cuando lleguen a la edad de jubilación puedan tener una vida digna. (ODS 1). Los seguros agrícolas y las coberturas contra las catástrofes climáticas garantizan la seguridad alimentaria al disponer de más y mejores alimentos (ODS 2). Los seguros de salud, los seguros de vida, las rentas vitalicias y las pensiones permiten un mejor vivir garantizando el cumplimiento del ODS 3 sobre la buena salud y bienestar. Los seguros laborares ayudan al trabajo decente y a la continuidad del mismo ante siniestros en los lugares de trabajo y otros ámbitos (ODS 8). A la hora de abordar el cambio climático los seguros juegan un rol clave, no solamente a través de sus coberturas, sino también por las inversiones que las aseguradoras realizan en proyectos y actividades de economía verde. (ODS 13). El sector asegurador colabora también con el desarrollo de todas las actividades industriales, comerciales y de servicios y contribuye a la protección de la infraestructura, las ciudades, los sistemas de agua limpia y los sistemas de energía. (ODS 6,7,9,11,12,15). Todo ello se logra gracias a los seguros que otorga el sector y a las indemnizaciones que se pagan cuando ocurren siniestros cubiertos por sus respectivas pólizas.

Sin duda, la inclusión aseguradora es fundamental para reducir la pobreza y las desigualdades existentes. La falta de seguros en la población más desprotegida los sumerge aún más la pobreza, los expone a catastróficas pérdidas de capital, ingresos o problemas de salud, vida o pensiones que afectan contundentemente a la estabilidad personal y familiar. Finalmente, la actividad aseguradora con sus inversiones, juega un rol fundamental en la recuperación post pandemia del COVID 19.

Nuestro sector se compromete a trabajar e impulsar las acciones que tengan por objetivo alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible señalados y a seguir trabajando y contribuyendo al bienestar de las personas, empresas y gobiernos de todos los países de la región.  Para ello, requerimos de un entorno económico y social adecuado en el cual se respeten los derechos de nuestras empresas y asegurados, al igual que las reglas de juego que garanticen seguridad jurídica y ámbitos propicios para la inversión, evitando políticas perjudiciales contra el sector.  Esta es, además, la mejor forma de enfrentar la peor crisis de las últimas décadas. Estaremos, de esta forma, garantizando la estabilidad y solvencia de las aseguradoras para que puedan seguir generando empleo, cumpliendo con sus compromisos y realizando inversiones.