«Los políticos británicos no han tenido visión y los continentales harán bien en reaccionar ante el brexit para que las cosas se gestionen mejor a partir de ahora en los 27 países que de momento seguimos juntos, aunque con velocidades diferentes en el grado de convencimiento de que estamos mejor juntos que separados.
La comisión electoral del brexit ha anunciado hoy que el resultado del referéndum ha sido favorable a la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
A continuación vamos a exponer las posibles consecuencias para las compañías hasta que se defina el proceso de salida de Reino Unido y se completen las negociaciones con la Unión Europea.
El pasado 23 de junio nos acostábamos creyendo que Reino Unido seguía en la Unión Europea, por la mañana del 24 la sorpresa fue mayúscula, BREXIT había ganado por casi cuatro puntos de diferencia.
Los comentarios en la prensa sobre brexit y en todos los medios apuntaban a que habían ganado las generaciones de personas mayores mayoritariamente contrarias a la UE frente a las de jóvenes partidarias de mantenerse, las zonas rurales e industriales frente a la city.
Conectaba aquel día siguiente con mi amigo Nick Davenport, asegurador y ex Presidente de BIPAR y me decía “que este referéndum innecesario y mal concebido sobre el brexit es una catástrofe para mi país” y añadía que “es imperioso que nuestros amigos nos den tiempo para la salida para encontrar una solución que impida la catástrofe”.
Desgraciadamente la catástrofe ya se ha producido y no hay manera de pararla. Ahora lo que procede es que nuestros políticos estén a la altura de las circunstancias y actúen con sensatez – no se trata de echar exabruptos contra los ciudadanos del Reino Unido – evitando los efectos negativos de las turbulencias que ya está generando el Brexit y poniendo en marcha acciones para reforzar la idea de Europa en la que muchos creemos que se ha venido diluyendo en los últimos 20 años por decisiones radicalmente equivocadas en economía, en finanzas y en la potenciación de una Unión más humana y solidaria.
También ha habido jóvenes preparados que han votado a favor del brexit porque no quieren una Unión Europea de burócratas insensibles e ineficaces que no son capaces de acelerar programas de inversión para resolver un paro juvenil preocupante, para una convergencia del sistema bancario y fiscal, para relanzar una economía europea que está quedándose paralizada frente a otras de países emergentes, incluso la de Estados Unidos.
¿Impactará la decisión de los ciudadanos británicos en la evolución del seguro británico?
Creo que sí aunque es verdad que pasará tiempo hasta que se note. En cualquier caso, desde ya, los expertos del Reino Unido ya no participarán en la ordenación legislativa, ni contarán con la libertad de establecimiento como hasta ahora, siendo tratado, hasta que no se lleguen a pactos bilaterales, a un tratamiento de país tercero sometido a autorizaciones que ahora no tenían las Entidades con sede en Gran Bretaña.
Fuentes autorizadas apuntan que muchas entidades de terceros que tenían a Londres como sede para trabajar en la Unión Europea se están planteando cambios de sede, las agencias de suscripción del Lloyd´s tendrán que adaptarse a criterios de mayores controles en el flujo de compensaciones financieras.
Todo tiene solución y esta situación también pero no deja de ser un contratiempo que nunca se debió plantear. Los políticos británicos no han tenido visión y los continentales harán bien en reaccionar para que las cosas se gestionen mejor a partir de ahora en los 27 países que de momento seguimos juntos, aunque con velocidades diferentes en el grado de convencimiento de que estamos mejor juntos que separados.
Mercer publicó inmediatamente de saberse el resultado a favor del brexit la nota que a continuación publicamos sobre su impacto en aspectos importantes de la economía y las finanzas.
Agradecemos a sus directivos su autorización para la publicación.
Analizar la exposición del capital humano tanto del Reino Unido como de Europa.
Todavía no se saben las restricciones que serán impuestas a la libre circulación de personas y es poco probable que la incertidumbre política, económica, legislativa y de los mercados de valores se aclare pronto.
Los detalles precisos no estarán claros hasta que las negociaciones se completen, no obstante parece probable que haya restricciones en el número de trabajadores europeos dentro de Reino Unido, con lo que las compañías deberían analizar su planificación del capital humano, particularmente en el sector de ventas, ocio y servicios, que dan empleo a gran cantidad de ciudadanos europeos.
Las organizaciones tienen que prepararse para un cambio en el empleo y el Mercado laboral de Reino Unido, el cual podría incluir un aumento de los costes de los trabajadores británicos que vivan y trabajen en la Unión Europea.
Seguir de cerca los acontecimientos y revisar las estrategias del riesgo.
Las comisiones de control de los planes de pensiones deben seguir muy de cerca los acontecimientos y tener en cuenta el impacto de los futuros movimientos en el mercado de valores. Las comisiones deben revisar las estrategias de riesgo y tener un especial foco en su exposición a divisa.
Las turbulencias del mercado de valores crearán retos añadidos para los partícipes de planes de pensiones. Mucha gente podría ver cómo su salud financiera y sus pensiones sufren cierta volatilidad a corto plazo.
Aquellos que buscan la seguridad de unos ingresos de por vida, incluso mediante la compra de activos de renta fija, pueden verse especialmente afectados.
Prepararse para una volatilidad del mercado de valores continuada en Reino Unido y Europa.
Además de las reacciones del mercado de valores a corto plazo, las empresas y las comisiones de control de los planes de pensiones deben estar preparadas para una volatilidad continuada tanto en Reino Unido como en Europa. La posibilidad de que otros países de la Unión Europea celebren también un referéndum podría minar el mercado europeo. Los planes de pensiones, en particular, deberían seguir de cerca su exposición a la divisa, tipos de interés y el riesgo del mercado de renta variable.
Considerar el impacto del fin de la reciprocidad de gastos sanitarios entre Reino Unido y la Unión Europea.
Las compañías deberían considerar el impacto del fin de reciprocidad de los gastos sanitarios entre los ciudadanos británicos que viven en estados miembros de la Unión Europea y ciudadanos de estos estados que viven en Reino Unido. Esto podría ocasionar la pérdida de acceso a la sanidad pública para expatriados y, por lo tanto, un aumento de la burocracia, incluyendo la obligación para la empresa de ofrecer cobertura médica. También será necesario aclarar cómo gestionarán y almacenarán los datos las multinacionales cuando se produzca la separación.
