«Dentro de los retos a gestionar en el 2019 creo que merece la pena destacar el riesgo regulatorio»
¿Puedes adelantarnos si se van a confirmar tus expectativas en el ejercicio 2018?
A expensas de los últimos datos de diciembre, creo que se cumplirán las expectativas de crecimiento en No Vida, superior al crecimiento de la economía española y crecimiento modesto, pero crecimiento, en el ahorro gestionado en Vida lo que, teniendo en cuenta la situación de los tipos de interés, creo que es positivo.
¿Cómo estás viendo la transformación digital del sector asegurador?, ¿Crees que se está desarrollando al ritmo adecuado?, ¿Cuáles crees que son los ejes fundamentales de la misma?
La transformación digital, afectando a los procesos, se está revelando como una prioridad para todas las entidades si bien, cada una lo está desarrollando con un modelo propio y distinta intensidad.
No se han hecho, en cambio, aún tan evidentes las transformaciones en los modelos de negocio.
Economía creciendo, incertidumbre política, nueva directiva de distribución (IDD), MIFID II, 4ª revolución industrial ¿cuáles son, a tu juicio, los principales retos a los que se tendrá que enfrentar el sector en este Nuevo Año?
Dentro de los retos a gestionar en el 2019 creo que merece la pena destacar el riesgo regulatorio. Más allá de la culminación de la tramitación nacional de ciertas normas (IDD, Mifid II, …) aparecen en el horizonte iniciativas internacionales que pudieran tener enorme, y no bueno, impacto en el seguro como son las normas internacionales de información financiera para el contrato de seguro, más conocida como NIIF 17.
Conseguida una prórroga de 1 año en su inicialmente programada entrada en vigor, resta por resolver un paquete de ajustes técnicos, proceso que concita un gran interés por parte de todos los operadores internacionales, sobre todo por lo que se refiere a negocios de medio y largo plazo.
La evolución macroeconómica, la inestabilidad política y comercial a nivel mundial, la demografía y las migraciones, creo que son los principales retos a que se enfrenta la economía mundial y, por tanto, el seguro.
La participación e inversión de las aseguradoras en el mundo de las startups/insurtechs sigue una senda exponencial. ¿Cuál es tu valoración e impacto de este movimiento en la transformación del seguro en 2019?
La colaboración, cada vez mayor y más estrecha, entre aseguradores y start ups es evidente que está dotando al seguro de mayor eficiencia y calidad en sus relaciones con los clientes.
La anunciada creación, por el Gobierno, de sand boxes, estoy segura supondrá un nuevo impulso en ese proceso.
Todos tenemos algún deseo cuando comienza una nueva etapa, como profesional de seguros comprometido, ¿nos puedes desvelar cuál es tu deseo para 2019?
Además de desear un buen comportamiento de la actividad aseguradora, con un sano crecimiento, en el 2019 me gustaría que alumbrara una autoridad independiente y especializada de supervisión de seguros, algo que venimos reclamando insistentemente desde el Sector asegurador, y que la contribución del Sector asegurador al crecimiento económico y social del país sea reconocida por la sociedad e impulsado por sus representantes políticos. Sencillos deseos, como puedes ver.