Vitaance nace con la obsesión de mejorar la vida de las personas y de poner la tecnología a trabajar para ellas desde el sector asegurador.
El gran reto es cambiar cómo las personas se relacionan con su seguro o aseguradora, que perciban ese valor tan importante y alineado con los intereses de negocio del sector, que los asegurados vivan más y mejor.Ana Zamora, CEO & Co-Founder de Vitaance Tuit
Mucho se habla de la digitalización en el sector asegurador. La aplicación de la tecnología puede abarcar aspectos tan diversos como buscar eficiencia en distintos procesos internos, reducción de costes, agilizar algunas operaciones, venta o distribución digital, etc. No obstante, el verdadero debate está en torno a la aportación de valor al cliente.
La vocación del sector asegurador es la de salvaguardar la estabilidad financiera de hogares y empresas, asegurando sus riesgos. Sin embargo, el seguro sigue siendo percibido como un mal necesario y es en raras ocasiones donde se percibe un valor real más allá del momento del siniestro.
Cambiar ese paradigma es la mejor aplicación de la tecnología posible.
Vitaance nace con la obsesión de mejorar la vida de las personas y de poner la tecnología a trabajar para ellas desde el sector asegurador.
El gran reto es cambiar cómo las personas se relacionan con su seguro o aseguradora, que perciban ese valor tan importante y alineado con los intereses de negocio del sector, que los asegurados vivan más y mejor.
Si algo se puede aprender del “big tech” es cómo se han introducido en la vida de los usuarios (casi todos nosotros) hasta el punto de que recurrimos a Youtube para buscar videos sobre cualquier tema, Google resuelve todas nuestras dudas, Amazon nos envía en 24 horas el producto que necesitemos y en cualquier cena con amigos siempre acabamos recomendando la última peli o serie de Netflix. Estos gigantes utilizan la tecnología para proporcionarnos valor
y entretenimiento de una manera escalable y que crea una recurrencia. En resumidas cuentas, son marcas que están presentes en nuestra vida, ¡incluso varias veces al día!
Eso es lo que nosotros llamamos vincular a un cliente. Desde Vitaance, buscamos revolucionar cómo las personas se relacionan con sus seguros de vida y salud. No es suficiente con decirles cómo tienen que cuidarse, crear contenidos y planes de bienestar. Se trata de incentivarles, de crear un juego al que quieran jugar, un juego en el que el objetivo final sea vivir más y mejor.
Hacer del bienestar algo divertido y que “enganche” es la clave para ser la solución aseguradora que viva en el móvil de nuestro cliente. La aplicación en la que piensen para establecer sus rutinas y objetivos, en la que se metan todos los días para ver su evolución y compararse con otras personas de intereses similares, y desde la que ganen premios por su
esfuerzo. Esta combinación de seguimiento diario, competición con otros, retos y premios, genera una vinculación y lealtad con la marca que va más allá de la mera transacción de compra del seguro y comunicación de una prestación.
Una vez cambiada la relación y el valor percibido por nuestro cliente, ¿qué más nos puede aportar la tecnología?
Como gestores de riesgos tenemos la obligación de prevenir, de reducir los riesgos antes de que se materialicen. El trabajo en algoritmos que relacionen los hábitos de vida de una persona y su bienestar a su longevidad y estado de salud es crucial en entender no sólo los riesgos en nuestros balances, sino también de gestionar activamente las prestaciones y su impacto en nuestros márgenes.
El internet de las cosas y los llamados “wearables” nos dan más información en un día que algunos reconocimientos médicos usados para la suscripción de algunos riesgos. El uso responsable de estos datos, en grandes volúmenes y frecuencia, nos lleva a un mucho mejor entendimiento de esos riesgos, de las correlaciones existentes entre las prestaciones y los hábitos de vida y de cómo, en definitiva, generar incluso más valor para nuestros clientes.
Cómo sector asegurador, podemos influir positivamente en mejorar lo más preciado que todos tenemos, la vida y la salud.