Hace unos cuatro años me pidió Antonio Viñuela, Consejero Delegado de Reale en España que le ayudase a relanzar el pequeño negocio de vida. Acepté encantado su invitación por la sencilla razón de que venía colaborando en sus actividades desde 2000 y tenía un razonable conocimiento interno de la Compañía.
La experiencia duró un año y ciertamente se logró promover una “cultura” vida donde no la había, incrementando notablemente el negocio y sus resultados. Las instrucciones de Antonio a su equipo directivo para que me apoyaran en todo hizo que mi intervención fuese muy satisfactoria y, por otra parte, sencilla.
No voy a entrar a explicar a fondo lo que propuse que tuvo que ver con la simplificación de la oferta de productos, la mejora del back office junto con algunos cambios informáticos, un mayor control de la actividad comercial y un programa de incentivación de la red comercial. Incluso se comenzó a redactar un plan estratégico a 3 años.
Cuando iniciamos la experiencia que comento, estaba Reale negociando con AEGON la compra de su filial Unión Aseguradora y una vez confirmada se concentró, a mi entender con buen criterio, en el negocio no vida. Por esa razón vendió todo el negocio de vida a AEGON.
Hace unos días me comentaba Antonio Viñuela que iban a volver al negocio de vida pronto. Mi discreción hizo que no indagase más y guardase el dato como reservado.
La semana pasada Actualidad Aseguradora publicaba una larga e interesante entrevista a Antonio y desvelaba la noticia de que constituirán una Compañía de Vida para comenzar la actividad a partir del 1º de mayo de 2010. Además explicaba dos razones poderosas para la recuperación de esa actividad, la necesidad de dar una respuesta integral a las necesidades de sus clientes de no vida y el poder contar para su desarrollo de su matriz Reale Mutua que conoce perfectamente en know how actuarial y financiero del negocio de vida.
Reale ha sabido captar la confianza de una parte importante de los mediadores en los últimos años con una política de servicio coherente, clara y sencilla. Estoy seguro que la ampliación de la oferta a vida y salud reforzará los vínculos de confianza y resultados con los mediadores y fidelizará más a los clientes.