8 de marzo 2014, día de la mujer trabajadora
Participa como ponente en los Master sobre Cooperación Internacional organizados por las Universidades del País Vasco, Barcelona, y Universidad Complutense de Madrid.
Entre otros reconocimientos, figura entre las TOP 100 Mujeres Líderes en España.
Por Marta Aburto, coordinadora de “Mujer y seguro” del Blog de Carlos Biurrun
1) ¿Cuál es en su opinión, el motivo fundamental por el que es tan lento el acceso de mujeres a posiciones directivas en el ámbito empresarial?
Las cosas de mucho calado siempre cuesta cambiarlas. Son muy recientes en la historia, los primeros pasos que se dieron para avanzar hacia el pleno cumplimiento de los derechos de la mujer, y además de eso… surgen muchas resistencias. Si bien se ha avanzado bastante desde la situación de partida, hay que seguir trabajando desde muchos frentes y en todos los ámbitos. En el educativo, familiar, político, profesional…. desde la igualdad en los salarios hasta la conciliación.
Todos, sin quererlo y sin darnos cuenta, en ocasiones pensamos o tenemos actitudes que no son adecuadas, tenemos interiorizadas, a través de generaciones, hábitos, lenguaje, actitudes, que no favorecen o ralentizan esos cambios.
Creo que hay que enfocarlo de manera positiva, mostrando lo enormemente beneficiosos que son para toda la sociedad los resultados cuando se logra la igualdad de oportunidades y de derechos para la mujer.
Sería bueno explicar más estos resultados para que se comprenda que no es algo que solo está ajustado a derecho, que por supuesto, sino que también proporciona unos excelentes resultados prácticos.
2) El parlamento Europeo ha respaldado la contratación prioritaria de mujeres para puestos en los consejos de administración de las empresas, siempre que los méritos sean iguales a los de los hombres ¿Está a favor o en contra de que se tomen medidas de discriminación positiva para fomentar dicho acceso?
Es un tema cuestionable y cuestionado ¡¡ pero también es verdad que se ha demostrado que cuando se hace una política de discriminación positiva se consiguen los cambios mucho más deprisa.
Por ello no es una política, desde mi punto de vista, válida para ser aplicada de forma permanente, a medio y largo plazo, pero sí es muy útil para salvar las resistencias e impulsar los cambios necesarios que tanto está costando conseguir.
3) ¿Cree en la relación positiva entre diversidad de género y competitividad empresarial?
Si, claro. El que la mujer tenga las mismas oportunidades y derechos que los hombres, es bueno siempre y en todos los ámbitos: en la familia, en la sociedad, en la política y también en la empresa.
Si la mujer no tiene acceso a los puestos de decisión en las empresas, estas están perdiendo el 50 por ciento del talento que hay en nuestra sociedad… además de eso, están desperdiciando la visión y las capacidades de las mujeres que en muchos casos son distintas de las de los hombres, y sin duda aportan enorme valor añadido.
4) ¿Cuál es el ejemplo concreto de liderazgo femenino que más le ha impresionado?
Lo que más me ha impresionado ha sido en situaciones de extrema vulnerabilidad, y de violación de los derechos humanos, en países empobrecidos donde ni siquiera las necesidades básicas están cubiertas.
Allí he constatado la capacidad y la fuerza de la mujer cuando tiene la posibilidad de recuperar su autoestima y descubrir que es capaz de gestionar su casa, la educación de sus hijos, su desarrollo…convertirse en líder y cambiar la vida no solo de su familia sino también de su comunidad, se convierte en motor de cambio, en foco de desarrollo.
Si esa fuerza la traspasamos a nuestra sociedad y a las mujeres que ejercen profesionalmente cargos de alta responsabilidad, se percibe el liderazgo que la mujer tiene en defender ese desarrollo global, que va más allá de los objetivos económicos en si mismos.
5) ¿Cree que la NO presencia de mujeres en los puestos superiores de las diferentes religiones, puede haber influido en el desequilibrio de género en el liderazgo social/empresarial que vivimos actualmente?
Es posible. Las religiones tienen una influencia y una trascendencia indudable en la conformación de las sociedades, y en la forma de vivir de las personas.
Pero es importante distinguir de forma rigurosa lo que realmente forma parte de la doctrina de cada una de las religiones de lo que a lo largo de la historia se ha ido “manipulando”, para mantener determinados intereses o privilegios por parte de determinados colectivos.
La cultura, la tradición, las creencias hay que respetarlas siempre, pero en el marco de referencia de los derechos humanos.
6) ¿Cree que la progresiva digitalización de nuestras vidas supone una oportunidad para conseguir mayor igualdad de género en lo que a liderazgo se refiere?
Por supuesto ¡¡ las nuevas tecnologías, como todo: bien utilizadas, son una herramienta extraordinaria, para conocer y para informar, para dar visibilidad a los problemas y a las situaciones que afectan negativamente a la mujer, para denunciar y buscar soluciones, para crear redes, acelerar procesos….para salvar vidas ¡
Por ejemplo, El caso de Malala , la niña paquistaní que fue agredida por defender el derecho a la educación de las niñas, hace pocos años hubiera tenido en el mejor de los casos un impacto local. Ahora ha movilizado a gobiernos, organizaciones, medios de comunicación y está consiguiendo cambios que son los primeros pasos para avanzar hacia la igualdad en el derecho a la educación universal.
Hay muchos ejemplos como éste.
En definitiva, es una herramienta muy valiosa y muy útil que está cambiando el mundo. Solo queda, que todos hagamos lo posible para que ese cambio sea en beneficio de la humanidad y no en su contra.
7) ¿Qué opina de las plataformas que apoyan únicamente a emprendedoras (eje. Womenalia)? ¿Cree que es buena idea o por el contrario puede alimentar el distanciamiento de género?
Sin duda son útiles, pero como decíamos antes, siempre enfocados hacia el objetivo de que todos, hombres y mujeres, estemos implicados en la defensa de la igualdad de oportunidades y de derechos, que todos estemos implicados en un compromiso que tiene que ser global de la sociedad.
Se trata de aprovechar al máximo el talento, de abrir vías y poner en marcha iniciativas para canalizarlo de la forma más eficiente posible.
8) Desde su experiencia en labores humanitarias ¿cree que evolucionamos hacia una sociedad más solidaria?
Creo que esta crisis ha supuesto un antes y un después.
Nos está exigiendo reflexionar sobre la situación de extrema pobreza en la que viven millones de personas en el mundo, el terrible sufrimiento que están padeciendo desde hace lustros.
Eso ha desarrollado una empatía que en muchos casos se ha transformado en solidaridad.
Se ha avanzado mucho, pero queda mucho por hacer, porque la solidaridad debe estar basada en el conocimiento de las causas y las consecuencias de la pobreza, de la exclusión y de la vulnerabilidad. No debe ser sólo una reacción emocional, sino que tiene que ser una decisión de compromiso, una actitud ante la vida.
Ese es un trabajo que deben hacer también las organizaciones humanitarias, lo que llamamos educación para el desarrollo. Educarnos como ciudadanos del mundo.
9) Teniendo en cuenta que las mujeres representan el 60% de personas más pobres ¿Considera que es obligación de las mujeres en puestos de responsabilidad hacernos oír para
ayudar a una sociedad más justa con las mujeres?
Si por supuesto, debemos dar voz a las que no la tienen y también aprender de las que luchan día a día en condiciones extremas, muchas veces arriesgando su vida. Deberíamos conocer mejor los avances que consiguen y sentirnos, de alguna forma, participes de todo ello.
Cree que los ciudadanos desde un consumo responsable (me refiero a informarnos, consumir e invertir en empresas que invierten en el bien común con programas transparentes, RSE…) podemos poner nuestro granito de arena para modificar este sistema basado en la competencia despiadada?
No solo es interesante sino que es necesario.
Las empresas que tienen una visión integrada de sus resultados económicos, y del impacto social y medioambiental de su actividad ya son y serán cada vez mejor valoradas.
La sociedad cada vez está más informada y está progresivamente incrementando su exigencia.
10) ¿Cree que es cierta la afirmación que a veces somos las propias mujeres las que nos ponemos barreras para nuestra propia promoción? ¿Ha experimentado usted alguna o ha sido testigo de ello en su trayectoria profesional?
Muchas veces somos demasiado tolerantes con determinadas actitudes y comportamientos. Muchas veces no somos conscientes de que nos estamos perjudicando a nosotras mismas porque los roles están tan definidos y arraigados y los tenemos tan interiorizados que no vemos las capas ocultas del problema y no reaccionamos ante ello.
Por otra parte, yo no lo he vivido personalmente, pero parece que hay experiencias en que al ser las dificultades para nosotras tan importantes, se producen reacciones de competitividad negativa entre las propias mujeres que nos perjudican como colectivo.
Por último y para terminar, ¿quién es Consuelo Crespo?
Ahora que veo las cosas con más perspectiva, me gusta volver a las raíces y recordar a mi madre, una gran mujer que me transmitió una escala de valores muy clara. Eso me ha ayudado a priorizar, a distinguir lo que es importante y lo que no lo es tanto y me ha sido útil en todos los ámbitos de la vida.
Me ha servido en ese intento permanente, que creo perseguimos todas las mujeres, de lograr el equilibrio entre lo profesional y lo familiar, entre lo social y lo personal.
Ahora se trata de conseguir que se establezcan los mecanismos necesarios para que todas, sin excepción, podamos conseguirlo.