Fuente: www.computing.com
La aparición de una nueva tipología de usuarios, más selectivos y mejor informados, que se mueven dentro de un mundo digital y que buscan servicios con valor añadido, serán los responsables de la fuerte transformación que experimentará el sector Seguros durante este año.
El cual, también tendrá que dejar de lado los sistemas tradicionales para adaptarse marco legal creado para regular el negocio electrónico, como la Ley de Medidas de Impulso de la Sociedad de la Información, junto a las prácticas telemáticas puestas en marcha en la administración pública con las empresas y los ciudadanos.
La necesidad de adaptarse al mundo on line y de mejorar los canales de comunicación y de relación con sus clientes hará que el mundo de los Seguros destine alrededor del 40% de su inversión en TIC a soluciones y herramientas destinadas a responder a las nuevas demandas del mercado. Así lo afirma la consultora española CMC, que asegura que este sentor se convertirá este año en uno de los motores que impulsen el sector las tecnologías de la información en España.
Para Javier Fernández Grande, director de Offering & Marketing del Grupo CMC, “no es exagerado decir que quizás estamos en un punto de inflexión en este sector que debe afrontar una serie de cambios profundos en cuanto a oferta de productos, la forma de relacionarse y fidelizar a sus clientes, así como en la de atraer a otros nuevos, y todo ello en medio de una creciente competitividad cuyos primeros síntomas sólo estamos empezando a percibir ahora”.
De hecho, según CMC, este proceso de renovación de clientes está siendo más rápido de lo que el propio sector preveía. Si bien esta transformación de la demanda era evidente, el sector preveía un período de cinco a seis años para poder asumir los cambios, pero estos plazos se han acortado prácticamente a la mitad, lo que está creando, según la consultora, grandes diferencias en el grado de gestión digital de los clientes entre unas marcas y otras.
Las previsiones CMC indican que este nuevo escenario obligará a las compañías de seguros a centrar sus esfuerzos en tres tareas fundamentales. La primera de ellas, a reorientar el negocio hacia un modelo de multi-distribución de la demanda y de la oferta, combinando las redes tradicionales de distribución con las modernas.
En segundo lugar, automatizar la gestión de las prestaciones, de los colaboradores y de los servicios de sus productos commodity en el entorno on line.
Y, por último, las compañías de seguros están abocadas a desarrollar modelos de multi especialización para productos técnicos complejos capaces de satisfacer la demanda cada vez más específica de los clientes. «Aquí el sector se enfrenta también a un serio problema, ya que calculamos que sólo el 10% de las redes actuales de mediación y de distribución de seguros están capacitadas para comercializar este tipo de productos”, concluía Fernández.